domingo, 11 de noviembre de 2007

Necedad de la Inocencia


Tierna dulzura... dónde fuiste, por qué ventana saliste volando que ahora no te encuentro, mientras me inundo entre las olas de la melancolía... nadando entre ellas te recuerdo, mirando en sus reflejos todos y cada uno de tus rostros, cuando sonreíste por primera vez, la primera ocasión en la que me tendiste la mano. Qué difícil es en ocasiones tratar de encontrarte amada alegría, eterno sentimiento que nos unió para siempre, aunque nuestras manos se hallen separadas... La razón niega todo lo conseguido, las palabras acallan todo cariño mientras los pies se alejan andando un nuevo camino. No te alejes tanto sin mirar atrás, avanza y no corras, deteniéndote de vez en cuando... para recordar algo que creíste perdido.
La sonrisa perdura aún cuando ya no te tengo cerca, salgo del lago que creé de lágrimas, estremeciéndome con el frío... que causa esta nueva mañana. Sé que te encuentras en alguna parte fiel candor, sé que puedo llamarte, y conservar en mi corazón... todo aquello que lograste.
El suelo brilla mientras ando, diminutas estrellas me invitan a avanzar, mientras el corazón se me encoge... al tratar de volar.

2 comentarios:

Count D dijo...

Los caminos se distancian,
pero los sentimientos nunca.

Esa fue la frase de una preciosa mujer que se encontro en su lugar opuesto.

"Tu amor vale mas que el oro, inclusó el platino"

te mando un abrazo como nunca lo sentiste

EGA dijo...

Los sentimientos nunca se distancian, permanecen como vínculos que nos llevan a lo eterno, mientras escribimos las líneas de la vida... nadando en este universo.

gracias por el abrazo, te mando otro igual de grande :)